Y viniendo a El como a una piedra viva, desechada por los hombres, pero escogida y preciosa delante de Dios, también vosotros, como piedras vivas, sed edificados como casa espiritual para un sacerdocio santo, para ofrecer sacrificios espirituales aceptables a Dios por medio de Jesucristo. Pues esto se encuentra en la Escritura: "He aquí, pongo en Sión una piedra escogida, una preciosa piedra angular, y el que crea en Él no sera avergonzado. Este precioso valor es, pues, para vosotros los que creéis; pero para los que no creen, La piedra que desecharon los constructores, esa, en piedra angular se ha convertido, y, piedra de tropiezo y roca de escándalo"; pues ellos tropiezan porque son desobedientes a la palabra, y para ello estaban también destinados.

Esta mañana, lo que me gustaría hacer es ver en detalle el punto principal de los versículos 6-8, para incentivar la fe en ustedes sobre cómo esta verdad nos concierne en la situación actual aquí en Bethlehem.

La semana, pasada examinamos los versículos 4 y 5 y vimos cómo llegar a Jesús, la Piedra Viva de Dios, nos convierte en piedras vivas y nos conforma en una casa espiritual para morada de Dios y también nos transforma en un sacerdocio santo, para que podamos ofrecer sacrificios espirituales de alabanza y obediencia, mediante Jesucristo, que sean agradables a Dios.

La clave era Cristo. Él es la Piedra Viva, la cual es la base de esta casa y Su vida se imparte a todas las pequeñas piedras – nosotros los creyentes – que son parte integral de un templo que late con vida.

Lo que vemos en los versículos 6-8 son citas del Antiguo Testamento, para mostrar de dónde Pedro sacó esta idea de Cristo como Piedra que Dios estableció en Sion. Pero, hay algo notable sobre la manera en que Pedro cita estos tres textos. No sólo los menciona, sino que los interpreta y les da a un giro tremendamente alentador para personas que están en nuestra situación.

Si Creen en la Piedra No pueden Perder

En el versículo 6, él cita a Isaías 28:16 y dice: "He aquí, pongo en Sion una piedra escogida, una preciosa piedra angular, y el que crea en Él no sera avergonzado". La cuestión aquí es que si creen en Cristo, la piedra angular de Dios, no se sentirán decepcionados. Esta piedra no fallará. Si construyen sus vidas sobre esta piedra, sus vidas no se desmoronarán en la tormenta. Si se refugian bajo esta piedra, van a estar a salvo. Si permanecen en la verdad de esta piedra, no se van a sentir avergonzados. Si se unen a otros en la casa espiritual construida sobre esta piedra, se van a sentir orgullosos del cimiento que tienen y la comunión permanecerá. "He aquí, pongo en Sion una piedra escogida, una preciosa piedra angular, y el que crea en Él no sera avergonzado".

En el versículo 7 a, Pedro expone en detalle la enseñanza con sus propias palabras: "Este precioso valor es, pues, para vosotros los que creéis". Él toma las palabra "preciosa" del versículo 6 – "Él es una preciosa piedra angular" - y dice que el valor inapreciable es para los que creen. Si creen en esta piedra – si confían en Él y si depositan su futuro en Él – entonces Él es valioso, porque nunca los va a defraudar o se van a sentir avergonzados. Jesús nunca les va a fallar. Otros puede ser, pero Jesús nunca.

Eso es un gran estímulo: ¿Si hubiera una manera para no sentirse nunca decepcionados o avergonzados, no les gustaría conocer esa manera? Pedro dice: esa manera es confiar en lo que Jesús será para ustedes como "la escogida y preciosa piedra angular" de Dios. Él dice: "No pueden perder. No pueden sentirse decepcionados al haber hecho esto. No pueden ser avergonzados". Eso es tremendamente alentador.

Si no Creen en la Piedra: No Pueden Ganar

¿Por qué no nos detenemos aquí? ¿Por qué, en la mitad del versículo 7, Pedro sigue hablando sobre el lado negativo de las cosas? ¿Por qué no es positivo y habla de los buenos efectos de creer, en vez de seguir hablando del lado negativo de la incredulidad?

Miren lo que dicen en el versículo 7b: "pero para los que no creen, La piedra que desecharon los constructores, esa, en piedra angular se ha convertido´". ¿Cuál es la finalidad de esto? Dice que no creer en Jesús es como rechazar la piedra que Dios puso como piedra angular. Dios envía a su Hijo para que sea la piedra principal del edificio de su iglesia – su pueblo. Pero, algunos no confían en Él; lo rechazan.

¿Qué efecto tiene esto en el propósito de Dios? Este es el punto: no derrota el objetivo de Dios en absoluto. "La piedra que desecharon los constructores, esa, en piedra angular se ha convertido". La cuestión es que si creen en esta piedra no van a perder; pero si no creen, no pueden ganar. La incredulidad humana no frustra o vence los propósitos fundamentales de Dios. Si Dios hace planes para que Jesús sea la principal piedra angular, los humanos pueden traicionarlo, abandonarlo, negarlo, burlarse de Él, golpearlo, escupirlo, pegarle con varas, coronarlo con espinas, romperle las vestiduras, crucificarlo y enterrarlo – pero no pueden impedir que sea lo que Dios lo destinó a ser, la Piedra Angular Viva de un gran pueblo glorioso.

“Y Para esto Estaban Destinados”

Por lo tanto, el objetivo de mencionar el lado negativo es para enfatizar que este no puede ganar. No puede frustrar los propósitos finales de Dios.

Esta es también la finalidad del impactante versículo 8. Pedro continua para decir (citando a Isaías 8:14) que Cristo se convirtió "en piedra de tropiezo y roca de escándalo"; pues ellos tropiezan porque son desobedientes a la Palabra y para ello [para ese fin] estaban también destinados". Las palabras de Pedro al final de este versículo tienen la intención de cortar el último vestigio de confianza en uno mismo: “para esto - este tropiezo, esta desobediencia – estaban destinados”.

En otras palabras, si cualquier incrédulo orgulloso se jactara y dijera: “He elegido mi propio destino – mi propia desobediencia y mi propio tropiezo - para mostrarle a Dios que yo tengo la última y definitiva palabra en mi vida; tengo el poder de mi autodeterminación final y puedo frustrar los objetivos de Dios con la autodeterminación de mi voluntad” – si alguien se jactara de esa manera, Pedro le responde con estas impresionantes palabras: No, no puedes. Solamente piensas que puedes. Pero, tarde o temprano, descubrirás que lo que sea que elijas – y tengan esto en cuenta, la elección de ustedes es verdadera e importante – para lo que sea que elijas, "para eso estabas destinado".

Dios, no el hombre, tendrá la última palabra. Ningún humano puede frustrar los propósitos fundamentales de Dios – crea o no crea.

¿Por qué Pedro Enseña algo tan Impactante?

¿Por qué Pedro enseña tal cosa? ¿Por qué, incluso, la plantea? Es para alentarnos. Lo que quiere decir es que las elecciones humanas no pueden finalmente destruir el templo de Dios. No son definitivas. Una persona puede rechazar la Piedra escogida y valiosa de Jesucristo. Pero, si lo hace, hay dos cosas aún que son ciertas:

1. Dios no rechazará la piedra, sino que será puesta en el lugar de honor y gloria para siempre como la principal piedra angular; y
2. los que la rechazan, nunca podrán jactarse de que frustraron el diseño final de Dios para su templo. Incluso los incrédulos cumplen los designios de Dios. No puede ser derrotado. Él triunfa aún ante su propio rechazo.

La Enseñanza para Nuestra Situación

Esa es la enseñanza para nuestra situación. Los grandes propósitos de Dios para construir su iglesia, Bethlehem incluida, frecuentemente se originan a través de ciclos de rechazo, pero al final Él triunfa y ninguno de nosotros puede arruinar su plan. Aunque rechacemos su método, no podemos destruir su plan. Una vez C. S. Lewis dijo: "Inevitablemente, todos servimos a Dios, pero hay una gran diferencia si lo servimos como Judas o como Juan. ¹" Al final Dios triunfa en nuestra fe o en nuestra incredulidad. Triunfa en nuestra obediencia o desobediencia. Los seres humanos, ya sean buenos o malos, rechacen o acepten, crean o no crean, no pueden frustrar los propósitos fundamentales de Dios. "La piedra que desecharon los constructores, esa, en piedra angular se ha convertido".

Hoy día en Bethlehem, Dios nos convoca a confiar en Él con respecto a esto. En estos días tremendos y maravillosos, quiero darles una perspectiva de algunas evidencias de Sus triunfos.

Palabras de Aliento de Amigos de Bethlehem

"Estoy sorprendido por la madurez espiritual y devoción que he observado. A causa de lo que ha sucedido y cómo se ha manejado, las cosas me empiezan a parecer más verdaderas. El pecado se manifiesta más verdadero. La madurez espiritual parece más verdadera. La oración se siente más verdadera. La posibilidad de la unidad de la iglesia parece más real. Y a Dios, que no es menos inconmensurable, lo siento más real".

"Hace un año y medio, le escribí a usted [Pastor John] enumerando cinco cosas que esperaba de una iglesia. Terminaba diciendo que estaba empezando a sentir que había encontrado lo que estaba buscando. Hoy no hay ninguna duda. Sí, estoy confundido, apenado, indeciso y entristecido por lo que ha salido a la luz. Sin embargo, me alegra que haya salido a la luz. De ninguna manera quiero minimizar el pecado que se cometió. 1 Samuel 2:12- 4:22 (Los hijos de Elí, el juicio de Dios para ellos y Elí, Icabod), ha agregado tanto más a mi templanza y temor como Hechos 5:1-10. Pero, al mismo tiempo, me he sentido inundado por un espíritu de humildad, honradez, quebrantamiento, mansedumbre, temor (de Dios) y amor manifestado por medio de todo el conjunto de miembros, en general y particularmente en los ancianos. ¡Oh, cómo he deseado formar parte de una iglesia así! ¡Qué maravilloso será cuando el novio haya terminado de purificar a su novia!"

- Un amigo de Bethlehem

"Satanás no necesita atacar a las iglesias poco entusiastas o que predican el evangelio de la salud y la prosperidad. Tenía que infiltrarse en Bethlehem".

"El manejo de la crisis por parte de la iglesia es bíblico y Dios ha comenzado una obra acá. Milagros y sanación. El 13 [de febrero] pude ver en dos ocasiones que los visitantes se sintieron profundamente tocados".

"El servicio del domingo pasado, (13 de Febrero de 1994), lleno de oraciones, alabanzas cantadas y sus palabras de la sabiduría bíblica del Apocalipsis fueron tanto un bálsamo sanador como un llamado a la introspección y al arrepentimiento".

"Dios perdonará, sanará y hará que sea para bien."

- Un amigo de Bethlehem

"Pudimos ser testigos del amor, del amor por Dios y Su pueblo, del odio por el pecado, del deseo por y el inicio de (por gracia de Dios) la reconciliación de un hermano caído, el quebrantamiento, la dependencia de Dios – fuimos testigos de la manifestación del Espíritu de Dios en Su pueblo".

"No sé todo lo que ha pasado, pero era obvio que los corazones estaban quebrantados. La recriminación llegará probablemente, quizá sea bueno y le de a la Comunidad una oportunidad para someterse a un ´filtro´. Tal vez muy poco se revelará de lo que su congregación ha experimentado – sólo Dios sabe. Quiero decir, como hermano en Cristo, que fue muy evidente para nosotros que el ministerio en Bethlehem tiene la marca de Dios. Pudimos verlo a Él en la gente, en los ancianos, en el Pastor. Gracias por la bendición y por permitirnos compartir el culto con usted en un momento tan difícil."

- Un amigo de Indiana

"Espero que no me malinterprete lo que estoy por decirle, pues se me hace difícil expresar mis sentimientos con palabras. Aunque el domingo pasado fue un día oscuro para Bethlehem, aún mientras compartía el servicio, me sentí muy privilegiado por estar allí. En ese momento, supe que no había ningún lugar más en la tierra en el que habría querido estar que en la Iglesia Bautista Bethlehem. Fue algo tremendo y maravilloso estar en la presencia de Dios, que es santo, puro, recto y justo. Mucho de lo que los cristianos hacemos y decimos refleja nuestra actitud alegre hacia Dios. Hablamos sobre Él como si fuera un compañero o un amigo, muy raramente consideramos el lado de Él que desprecia la iniquidad y no tolera el pecado. El domingo, me sentí profundamente humilde al estar entre la gente en Bethlehem y que me hagan recordar Quién es realmente Dios.

"En segundo lugar, me sentí sumamente estimulado al presenciar la actitud colectiva de profunda pena y confesión, no solo de su personal y de los ancianos, sino de la congregación entera. Aunque estuvimos considerando el pecado de una persona, el foco reflector de Dios también examinó mi corazón".

"Dios debe de amar mucho a la iglesia Bautista Bethlehem. Podría haber dejado que no se revelara el pecado, entonces habría crecido e infectado. Sin embargo, eligió revelarlo para que Él pudiera limpiar, perdonar, sanar y unificar la iglesia otra vez. En Bethlehem hay una comunión maravillosa y aunque no pertenecemos a su iglesia, sentimos una amor especial".

- Amigos visitantes que pertenecen a otra iglesia local

"La iglesia en la que me crié estaba cargada de pecados. Incluso como alumna intermedia y de secundaria era consciente de un asunto continuado en la iglesia que no se reconoció o revisó durante años. Cuando finalmente se hizo, no se tomó ninguna medida disciplinaria y nada cambió. El caso continuó, más secretamente. Se que todos en esa iglesia se veían afectados por ese cáncer, y muchos otros cánceres, que crecían entre nosotros sin obstáculos. Por eso es que estoy tan agradecido a Dios por su buena disposición al arriesgar su amistad personal con Dean, arriesgar el excelente ministerio de música de Bethlehem, la reputación de nuestra iglesia, que la congregación se volviera contra usted y probablemente arriesgar mucho más. Gracias por su honestidad y su compromiso con la verdad y la piedad. En estos encuentros, me he sentido inundada de amor por ustedes, los líderes de esta iglesia".

- Una amiga de Bethlehem

"Por favor, siéntanse animados porque el dolor y las oraciones no han sido en vano, porque Dios obra en nuestros corazones, como así también en los corazones de cientos de personas en Bethlehem como resultado de este tiempo de humillación. Su sensibilidad y obediencia al Señor se han evidenciado y todas sus decisiones concernientes a asuntos disciplinarios han sido justificadas".

- Un amigo de Bethlehem

"Al personal, miembros y comunidad de Bethlehem:

'Todavía tengo confianza en esto: Veré la bondad del Señor en la tierra de los vivientes. Espera al Señor,

esfuérzate y aliéntese tu corazón y espera al Señor for the Lord' (Salmos 27:13-14). 'Venid, volvamos al Señor,

pues Él nos ha desgarrado, pero nos sanará: Nos has herido pero vendará nuestras heridas. Después de dos días, nos hará revivir,

al tercer día nos levantará para que vivamos en su presencia. Esforcémonos por conocer al Señor. Su aparición es tan cierta como la aurora

y vendrá a nosotros como la lluvia, como la lluvia de primavera que riega la tierra”. (Oseas 6:1-3).

"Tan cierto como la aurora de este día es la certeza de que Dios aparecerá y traerá a Bethlehem la lluvia primaveral de consuelo, restauración, sanación y renovación".

"Entristecido y circunspecto, oro con usted y por usted con gran esperanza".

—- Un amigo de Michigan

Esta noche, consideramos la cuestión de cómo el plan del órgano se relaciona con lo que ha pasado en las semanas recientes. Cuando el personal se fue a un retiro la semana pasada, alguno de nosotros sentimos que teníamos que habíamos caminado hacia el claro cielo azul de esperanza después de la tragedia de nuestra pérdida, solamente para salir del apuro y encontrar un monstruo esperándonos – es decir, la implicación del órgano durante siete años de engaño y adulterio.

Pero, Dios llegó a nosotros con algunas Escrituras esperanzadoras, que voy a compartir con ustedes esta noche, que nos ayudaron a interpretar con esperanza lo que significa esa imagen. Ahora, solo voy a decir que hay una buena razón, tanto de 1 Pedro como de nuestra reciente experiencia, para creer que Dios triunfará en Bethlehem y que el milagro de liberación y unidad que Dios obró en nosotros, el lunes 7 de febrero a la mañana, cuando Dean confesó, es la clase de milagro que podemos prever mañana también. Qué Dios inunde esta iglesia con el mismo espíritu de oración apasionada con el que lo hizo hace tres semanas.

¹ No puedo recordar en qué libro leí esta cita, pero la sustancia de la misma se encuentra en El Lewis citable (The Quotable Lewis), editado por Wayne Martindale y Jerry Root, #1170.