La oración, el ayuno, y el curso de la historia
Hechos 13:1-4
En la iglesia que estaba en Antioquía había profetas y maestros: Bernabé, Simón llamado Niger, Lucio de Cirene, Manaén, que se había criado con Herodes el tetrarca, y Saulo. Mientras ministraban al Señor y ayunaban, el Espíritu Santo dijo: Apartadme a Bernabé y a Saulo para la obra a la que los he llamado. Entonces, después de ayunar, orar y haber impuesto las manos sobre ellos, los enviaron. Ellos, pues, enviados por el Espíritu Santo, descendieron a Seleucia y de allí se embarcaron para Chipre.
En esta mañana comienzo una serie de mensajes sobre la práctica bíblica de ayunar. Esto no es nuevo para nosotros en Bethlehem. Hemos enseñado antes sobre él y hemos llamado al ayuno, especialmente durante la Semana de Oración en los años anteriores. Pero cuando hicimos la investigación en el servicio matinal, hace unas semanas, encontramos que el 40% de los que asistían esa mañana habían estado en Bethlehem solo tres años, o menos. Lo que pudiera significar que el ayuno es una disciplina bíblica en la que usted no piensa mucho, y que practica mucho menos, pues no es una práctica corporativa muy practicada en el movimiento evangélico.
Espero, al menos durante el mes de Enero y quizás más, si el Señor nos dirige, hacer hincapié en esta disciplina bíblica tan negada. Si usted ha leído el Bethlehem Star, sabrá que estoy llamando a ayunar durante 24 horas cada semana de este mes, al comenzar el año 1995: desde el miércoles después de la cena durante el almuerzo del miércoles. Juntos, estaríamos saltando el almuerzo y la comida del miércoles, y dedicaríamos esos dos momentos de alimentación, si es posible, a la oración en ayunas para que 1995 sea un año de gran despertar en el cuerpo de Cristo; un avivamiento de santidad y felicidad y oración y fidelidad y productividad en el ministerio unos a otros y para alcanzar a los perdidos. Mi oración es que mediante estos mensajes usted escuche el llamado de Dios en mi llamado a ayunar.
El hambre de Dios dirigía Antioquía
Quizás usted comprenda mejor por qué creo que esta es la voluntad de Dios si vamos directo a nuestro texto. La situación es que Saulo (Pablo) y Bernabé y algunos otros líderes, en la iglesia en Antioquía, estaban adorando, ministrando al Señor, y ayunando (v.2). Juzgando por lo que sucedió podemos asumir, pienso, que la carga que les llevó a ayunar es: "¿A dónde debemos dirigirnos como iglesia?" Estaban ayunando para buscar la guía del Espíritu Santo en la dirección de su misión. Usted pudiera llamarlo planeamiento a largo plazo. El resultado fue más magnífico que cualquier otro planeamiento a largo plazo que haya tomado alguna vez la iglesia.
Ellos estaban suficientemente hambrientos por la guía de Dios que querían expresarlo con el hambre de sus cuerpos y no solo con el hambre de sus corazones. "¡Queremos tu guía oh Dios! ¡Oh Espíritu Santo, ¿cuál es tu voluntad para la misión de esta iglesia?!"
¿Sabe usted que es lo que aturde mi mente sobre la planificación a largo plazo en Bethlehem? La mayoría de las preguntas que necesitamos responder no son explícitamente respondidas en la Biblia. Las que tienen respuestas bíblicas claras no requieren un equipo de planificación para ser discernidas. Las preguntas que nos presionan son el tipo de preguntas que enfrentaron los líderes en Antioquía. "Señor, ¿debiéramos comenzar una aventura misionera mundial? ¿Debiéramos comenzar ahora? ¿Debiéramos enviar a algunos de nuestros propios maestros? ¿Debiera ser Saulo, o Simeón, o Niger, o Lucius, o Bernabé? ¿Debiéramos enviar a dos o tres o cuatro? ¿Por qué camino debiéramos enviarlos: por tierra o por mar? ¿Debiéramos respaldarlos plenamente o debiéramos esperar que trabajen para su sostén o esperar que los hijos de paz en los pueblos a donde van los alimenten? ¿Debieran unírsenos otras iglesias?" Etc.
De ese tipo son la mayoría de las preguntas que tienen que responder los equipos de planificación. ¿Dónde recibirán las respuestas? ¿Tenemos algo que aprender del hecho de que estos primeros líderes cristianos profundamente espirituales adoraron y ayunaron y oraron mientras buscaban la guía del Señor?
Cuatro observaciones
Considere cuatro observaciones a partir de Hechos 13:1-4.
*1. Después de la venida de Cristo *
Este ayuno ocurrió después de la venida de Cristo.
Solo hago esta aclaración para que alguien no diga que el ayuno era parte de la espiritualidad del Antiguo Testamento, pero no de la espiritualidad del Nuevo Testamento. La próxima semana abordaremos este asunto, y preguntaremos: "¿Es el ayuno parte de un viejo odre que necesita ser descartado para que el nuevo vino del reino no explote los odres y se pierda?" La respuesta aparente es que Saulo y Bernabé y los demás en Antioquía no pensaban que el ayuno fuera un viejo odre.
2. Por un grupo reunido
Este ayuno fue hecho por un grupo reunido.
Otra preocupación con el ayuno es que Jesús advirtió contra el ayuno que era para ser visto por los hombres (Mateo 6:17-18). Dijo: "tu Padre, que ve en lo secreto, te recompensará". Pero Pablo y Bernabé evidentemente no creyeron que Jesús quiso decir que ayunar en grupo fuera malvado, incluso cuando las personas a menudo saben que usted está ayunando al ser parte de un grupo, como cuando se llama a un ayuno de toda la iglesia (como el llamado que estoy haciendo para los miércoles durante el mes de Enero).
Evidentemente, los líderes en Antioquía creían que Jesús no dijo que pecaríamos si alguien supiera que estamos ayunando, sino que pecaríamos si nuestro motivo es ser conocidos por nuestro ayuno para que los hombres nos aplaudan. El ayuno en grupo ha sido una característica del pueblo de Dios durante toda la historia bíblica y post-bíblica.
*3. Una ocasión para la guía especial del Espíritu *
Este ayuno demostró ser una ocasión para la guía especial del Espíritu.
El versículo 2 dice:
Mientras ministraban al Señor y ayunaban, el Espíritu Santo dijo: Apartadme a Bernabé y a Saulo para la obra a la que los he llamado. Entonces, después de ayunar, orar y haber impuesto las manos sobre ellos, los enviaron.
Al informar de este modo, Lucas claramente quiere que veamos una relación entre la adoración, la oración, y el ayuno, por un lado, y la guía decisiva del Espíritu Santo por el otro.
Sin una evidencia de lo contrario, yo diría que esto nos enseña el valor de la oración-ayuno-adoración en la búsqueda ferviente de la voluntad de Dios para nuestras vidas y para la vida de nuestra iglesia.
*4. Cambió el curso de la historia *
Este ayuno cambió el curso de la historia.
Es casi imposible exagerar la importancia histórica de este momento en Antioquía para la historia del mundo. Antes de esta palabra del Espíritu Santo, no parece que hubiera una misión organizada en la iglesia más allá de la costa occidental del Mediterráneo. Antes de esto, Pablo no había hecho viajes misioneros hacia el oeste, Asia Menor, Grecia, Roma, o España. Antes de esto Pablo no había escrito ninguna de sus cartas que fueron, todas, resultado de sus viajes misioneros que comenzaron aquí.
Este momento de oración y ayuno resultó en un movimiento de misiones que haría que el cristianismo fuera la religión dominante del Imperio Romano durante en dos siglos y medio, y que hubiera 1.3 billones de seguidores de la religión cristiana, con un testimonio cristiano casi en cada país del mundo. Y 13 de los 29 libros del Nuevo Testamento fueron resultado del ministerio lanzado en este momento de oración y ayuno.
Así que pienso que es correcto decir que Dios se complació en hacer que la adoración y la oración y el ayuno fueran la rampa de lanzamiento para una misión que cambiaría el curso de la historia. ¿No hay aquí una lección para nosotros?
Había ocurrido antes y podía ocurrir una y otra vez en la historia.
Ocurrió en 2do de Crónicas 20.
Por ejemplo, en 2do de Crónicas 20, los moabitas y amonitas y meunitas vinieron contra Josafat, el rey de Judá. Era una horda de personas aterradoras y violentas. ¿Qué haría el pueblo? ¿Qué dirección tomarían? El versículo 3 dice:
Y Josafat tuvo miedo y se dispuso a buscar al Señor, y proclamó ayuno en todo Judá. Y se reunió Judá para buscar ayuda del Señor; aun de todas las ciudades de Judá vinieron para buscar al Señor.
De modo que hubo un gran ayuno nacional para recibir la guía y liberación divinas. En medio de esa asamblea de ayuno, dicen los versículos 14-15:
...el Espíritu del Señor vino en medio de la asamblea sobre Jahaziel. . . y dijo: Prestad atención, todo Judá, habitantes de Jerusalén y tú, rey Josafat: así os dice el Señor: “No temáis, ni os acobardéis delante de esta gran multitud, porque la batalla no es vuestra, sino de Dios".
Al siguiente día, cuando salió el pueblo de Judá, encontraron que el pueblo de Moab y Amón se habían destruido uno al otro, y les tomó tres días recoger los despojos, tanto había. Lo que parecía derrota y calamidad, en una noche se convirtió en triunfo.
De nuevo, el curso de la historia fue cambiado mediante el ayuno del pueblo de Dios.
Ocurrió en Gran Bretaña en 1756
John Wesley nos cuenta una historia similar de liberación en su diario, en 1756. El rey de Bretaña llamó a un día de oración y ayuno solemnes debido a una amenaza de invasión de Francia. Wesley escribió:
El día de ayuno fue un día glorioso, apenas se había visto un semejante en Londres desde la restauración. Cada iglesia en la ciudad estaba más que llena, y había una seriedad solemne en cada rostro. Ciertamente Dios escuchó la oración, y habrá una prolongación de nuestra tranquilidad.
Entonces, en una nota al pie, añadió: "La humildad se convirtió en regocijo nacional porque la amenaza de invasión de parte de Francia fue quitada". No sería difícil multiplicar historia tras historia en la Biblia y después de la Biblia para mostrar que el ayuno y la oración han cambiado el curso de la historia. En las próximas semanas veremos que esto es especialmente cierto en el modo en que el ayuno aparece en momentos de grandes avivamientos.
Pero permítanme poner nuestro enfoque, del ayuno y de nuestro llamado a ayunar, en un contexto más amplio de lo que Dios parece estar haciendo hoy, y luego en lo que pudiera estar haciendo en Bethlehem.
Lo que Dios parece estar haciendo hoy en el mundo
En noviembre uno de ustedes vino a mí y dijo que pensaba que Dios pudiera estar llamándonos a un día de ayuno a la semana como iglesia. ¿Oraría yo por ello y trataría de discernir si esto venía de parte de Dios para este tiempo? Recientemente fui invitado por Bill Bright, el líder de la Campus Crusade, para unirme a otros 600 en Orlando, 5-7 de Diciembre, en dos días de oración y ayuno a favor del despertar en nuestra tierra para el avance del reino alrededor del mundo.
Decidí ir, con el deseo de que Dios pueda guiarme en relación a cómo debiera estar el ayuno en este momento en la historia de nuestra iglesia. Bill Bright dijo que había completado un ayuno de 40 días el verano pasado y que se había sentido guiado a convocar a este tiempo de ayuno y oración con la esperanza de reavivar la práctica del ayuno-oración en las iglesias de Norteamérica.
*La reaparición de la adoración y la oración, pero no del ayuno *
Una de los descubrimientos que hice en Orlando fue que hay tres elementos en Hechos 13:1-3, adoración, oración, y ayuno. En nuestros días ha habido una importante reaparición de la adoración y la oración. Decenas de miles de congregaciones alrededor del mundo están experimentando una adoración más vibrante, liberadora, y comprometida que hace 20 años. Y los movimientos de oración alrededor del mundo no tienen precedentes en número y alcance. En nuestro estado, la Minnesota Prayer Coalition no tiene precedentes en cooperar con el cuerpo de Cristo para orar por el avivamiento de la iglesia de cristo y el avance de su reino.
Pero aún no hay una reaparición comparable en la práctica del ayuno como la ocurrida con la adoración y la oración. Bill Bright sugirió que Dios quizás quiera que las tres ocurran juntas, y que la iglesia se humille y sienta hambre con el ayuno antes de bendecirnos tan plenamente como desea. Es sorprendente cuán negada es esta práctica espiritual.
*Una creciente hambre por el ayuno *
Lo primero que hicieron en Orlando fue abrir los micrófonos para que algunos dijeran por qué habían venido. Yo estaba escuchando con mis oídos sintonizados con nuestra situación aquí, y por la cuestión de si debiéramos llamar a un día de ayuno cada semana. La segunda persona en levantarse dijo que pertenecía los Promise Keepers, y que estaba allí porque creía que el ayuno era crucial y que los Promise Keepers estaban considerando seriamente llamar a los hombres a un día de ayuno a la semana: el miércoles. Después, en el encuentro, Paul Cedar, de la Free Church dijo que históricamente la iglesia ha hecho que el ayuno semanal fuera parte de su vida. Se preguntaba si debiéramos hacerlo de nuevo.
Cuando regresé, Bob Hamlett me mostró que los Promise Keepers habían, de hecho, nacido en una atmósfera de ayuno. En la publicación de otoño de Men of Action, dice:
En 1990 el entrenador McCartney pidió a 72 hombres que se comprometieran a orar y a ayunar durante el almuerzo cada miércoles [que es el día al que llamo yo], orando específicamente para que el Dios Todopoderoso conmueva los corazones de los hombres para buscar a Jesucristo. La junta, el equipo de liderazgo, y muchos en el personal están comprometidos con este fin, y nosotros les invitamos a ustedes a unírsenos.
Bien, estoy feliz de decir a Promise Keepers y a Bill Bright y creo que a miles de otros creyentes alrededor del mundo, especialmente en lugares como Sur Corea, que anhelo unirme a ustedes Y estoy llamando a nuestra iglesia a unirse a ustedes también.
Estos son días maravillosamente llenos de esperanza en Bethlehem. La próxima semana explicaré, partiendo de Mateo 9:14-17, porqué pienso que las personas llenas de esperanza quieren ayunar. Entre tanto, le invito a hacer varias cosas. Adquiera y lea God's Chosen Fast, de Arthur Wallis "El ayuno escogido por Dios", ore sobre cómo querrá el Señor que usted se una en los tiempos especiales de oración en esta semana, incluyendo la noche de oración este viernes, y buscando al Señor con relación a Su llamado a ayunar en su propia vida.