Mi oración a Dios es que se salve
Hermanos, el deseo de mi corazón y mi oración a Dios por ellos es para su salvación.
Aún cuando el apóstol Pablo dijo en Filipenses 3:12: “No que ya lo haya alcanzado o que ya haya llegado a ser perfecto, sino que sigo adelante, a fin de poder alcanzar aquello para lo cual también fui alcanzado por Cristo Jesús”. Sin embargo, dijo en Filipenses 4:9: “Lo que también habéis aprendido y recibido y oído y visto en mí, esto practicad, y el Dios de paz estará con vosotros”.
En otras palabras, a pesar de que Pablo no fue perfectamente impecable, condujo a personas a tomar su propio corazón y su vida como una guía de obediencia. Cuando expone ante a nosotros, en sus enseñanzas, sus puntos de vista y sus costumbres, lo hace porque debemos imitarlas. Sus enseñanzas son Palabra de Dios para nosotros tanto como lo son sus sentencias doctrinales.
Por tanto, cuando dice en Romanos 10:1: “Hermanos, el deseo de mi corazón y mi oración a Dios por ellos es para su salvación”. Quiere decir: «Sean así. Tengan un corazón como el mío».
Entonces la semana pasada nos enfocamos en la primera mitad del versículo: “…el deseo de mi corazón por ellos… es para su salvación…”
¿Qué Aprendemos de la Realidad de que Pablo Está Orando por Israel?
“Ellos” se refiere a Israel, sus familiares, el pueblo escogido por Dios. Ahora, ¿qué aprendemos de la realidad de que Pablo está orando por Israel? Solamente mencionaré tres verdades: Aprendemos que su oración es
- una oración universal,
- una oración individual,
- una oración por la obra eficaz y salvadora de Dios.
1. Una Oración Universal
Para analizar esta verdad necesitamos mirar el papel de Israel en la historia de la redención descrita en el capítulo 11. Primero, mire el versículo 11:25,26: “Porque no quiero, hermanos, que ignoréis este misterio, para que no seáis sabios en vuestra propia opinión: que a Israel le ha acontecido un endurecimiento parcial hasta que haya entrado la plenitud de los gentiles; 26 y así, todo Israel será salvo…”.
El Plan de Dios por Israel y los Gentiles
Esta es la verdad que vemos aquí: cuando Dios menospreció a las naciones desobedientes en Génesis 11, su decisión fue llamar para sí a un hombre: Abraham, y hacerse un pueblo a través de ese hombre. Les dio las promesas y los pactos, las revelaciones de su gloria y revelaciones de su voluntad, así como también les dio una forma de perdón en los sacrificios; y finalmente les dio al Mesías, Jesucristo.
Pero a pesar de todo, el pueblo era rebelde, y solo un remanente confió en las promesas de Dios y vivió la obediencia de la fe. Así que cuando el Mesías fue rechazado, el evangelio se expandió más allá de las riberas de Israel para bendecir al mundo de los gentiles. Ahora, Pablo dice: «Vino un endurecimiento sobre la mayor parte de Israel antes que llegara la plenitud de los gentiles». Es decir Dios ha abandonado a Israel en su pecado por una razón. Y su propósito es juntar a su pueblo de entre todas las lenguas, tribus, pueblos y naciones hasta que todos los escogidos sean salvos.
Pero entonces, cuando la gran comisión alcance su plenitud, el Espíritu de Dios quitará la dureza de Israel y ocurrirá un gran despertar, entonces Israel y las naciones en general se convertirán a Cristo y serán salvas.
Usted puede ver este plan de Dios en los versículos 30-31: “¿Qué diremos entonces? Que los gentiles, que no iban tras la justicia, alcanzaron justicia, es decir, la justicia que es por fe; 31 pero Israel, que iba tras una ley de justicia, no alcanzó esa ley”.
Este es el mismo y extraño modelo de salvación que vimos en el 11:25-26. Primero, los gentiles son desobedientes. Luego, a través de la desobediencia de Israel, los gentiles reciben misericordia. Esto quiere decir que viene un endurecimiento sobre Israel hasta que los gentiles sean misericordiosamente reunidos desde todos los rincones de la tierra, lo vemos en el versículo 30. Pero ahora el versículo 31 completa el plan de Dios. La razón suprema por la que Israel fue desobediente es la misericordia que debería alcanzar a los gentiles y de esta misma manera Israel también recibiría misericordia y sería salvo.
Como la Oración de Pablo es Universal
Usted puede ver de nuevo el mismo modelo de redención en Romanos 11:11-12,15. Pero, por el momento, lo anteriormente expuesto es suficiente para demostrar que la oración de Pablo era una oración universal. ¿En qué sentido era una oración universal?
Era universal en el sentido de que debería incluir la plenitud de los gentiles, quienes serían injertados a través del cumplimiento de la gran comisión. ¿Cómo podría Pablo orar por la salvación de Israel cuando enseña que ha venido un endurecimiento sobre la mayoría del pueblo de Israel hasta que se cumpla la plenitud de los gentiles? La respuesta debe ser que su oración incluía a la congregación de la plenitud de los gentiles.
Cuando mi esposa está lejos de la ciudad y oro a fin de que disfrute de una cena especial con nosotros en la tarde, también estoy orando a fin de que tenga un viaje seguro. Eso está necesariamente incluido en mi oración. Así, cuando Pablo ora por la conversión de Israel está orando también por la congregación de la plenitud de los gentiles. Está orando por el cumplimiento de la gran comisión. Es una oración universal.
2. Un Oración Individual
La oración de Pablo no era solo por la conversión colectiva de todo Israel en el futuro, era también una oración individual por los judíos a través de su propio ministerio. Lea detenidamente Romanos 11:13-14: “Pero a vosotros hablo, gentiles. Entonces, puesto que yo soy apóstol de los gentiles, honro mi ministerio, 14si en alguna manera puedo causar celos a mis compatriotas y salvar a algunos de ellos”.
Pablo no solo confió en la conversión de “todo Israel” después de que se cumpliera la plenitud de los gentiles (11:26); también luchó por la salvación de «algunos» israelitas a través de su propio ministerio. Lo hizo así: otorgándoles a los gentiles los privilegios de los judíos. Es decir, les dijo que podían convertirse en herederos de Abraham (Gálatas 3:14,29) y en «verdaderos judíos» (Romanos 2:29, DHH) solo con creer en Jesús quien fue la simiente de Abraham.
La meta de Pablo fue darle celos a los Israelitas. Quería que los israelitas vieran a los gentiles disfrutando la esperanza y el perdón, experimentando un cambio de vida con relación al Dios de Abraham, Isaac y Jacob. Esperanzado en que esto ayudaría a los judíos a ver que la fe, y no las obras, son el verdadero camino para el cumplimiento de la ley ¿Qué otro motivo los podría conducir a arrepentirse, a creer y a ser salvos?
Y mi conclusión a este esfuerzo estratégico para ganar a algunos israelitas, es que Pablo seguramente oró por la conversión de estos judíos. Sin duda alguna, dijo mientras entraba en una sinagoga a predicar: «Señor soberano, complácete en vencer la dureza de corazón de algunos israelitas en esta sinagoga. Abre sus corazones de tal manera que puedan prestar atención al evangelio y ser salvos». Lo cual nos lleva a la tercera lección que nos brinda la oración de Pablo por Israel.
3. Una Oración por la Obra Salvadora y Efectiva de Dios
Pablo ora para que Dios realmente salve a Israel. Es decir, Pablo no ora para que Dios los capacite solamente para que se salven a sí mismos. Ora por salvación de ellos no solamente por su estabilidad
.
Esto es lo que quiero decir. Si cree que Dios tiene el derecho y el poder de levantar a los muertos espiritualmente y conceder arrepentimiento a los desobedientes y misericordia a quien quiera dar misericordia, entonces ore esperando que Dios lo haga. Pídale a Dios hasta que salve, que los saque del fondo del lago, que deslice sus cuerpos desfallecidos por el borde del bote y que haga lo que tenga que hacer para mantenerlos vivos espiritualmente.
No Podrá de Pedirle a Dios que Salve a Nadie
Pero si cree que Dios no tiene este derecho sino que el hombre es quien tiene el derecho de la autodeterminación final, que el hombre decide quienes y cuantos morarán en el reino final de Dios, entonces en realidad no podrá de pedirle a Dios que salve a nadie.
- Usted no podrá orar: «Dios saca de ellos el corazón de piedra y dales un corazón de carne» (Ezequiel 11:19).
- No podrá orar: «Señor, circuncida su corazón de manera que te amen» (Deuteronomio 30:6).
- No podrá orar: «Padre, pon tu Espíritu dentro de ellos y haz que anden en tus estatutos» (Ezequiel 36:27).
- No podrá orar: «Señor, concédeles arrepentimiento y el conocimiento de la verdad» (2da a Timoteo 2:25-26).
- No podrá orar: «Abre sus ojos de manera que crean al evangelio» (Hechos 16:14).
Y no podrá orar así porque todas estas oraciones le dan a Dios un derecho que usted ha reservado para el hombre, es decir la determinación suprema y decisiva de su destino. Si le pide a Dios que haga cualquiera de estas cosas, entonces él sería quien realmente salve.
Orando a un Dios que no Salve a Nadie Decisivamente
¿Cómo debiera orar si creyera realmente que es el hombre y no Dios quien debe tomar las decisiones supremas acerca de la salvación en el universo? Un buen ejemplo es el libro de Dick Eastman: The Hour That Changes The World [“La Hora Que Cambió Al Mundo”]. Él cree que el supremo poder de autodeterminación del hombre debe ser preservado cuando oramos a Dios. ¿Cómo? Al final de su libro en una sección titulada How to Pray for the Lost [“Cómo orar por los perdidos”] (pp.157-161), Eastman dice que debemos pedir a Dios que haga que en las personas que se planteen 6 preguntas cruciales: ¿En quién puedo confiar? ¿Cuál es mi propósito? ¿Cuándo seré verdaderamente libre? ¿Por qué las personas odian la religión? ¿Cómo puedo luchar? ¿A dónde iré cuando muera?
La Oración Inconsistente
Por ejemplo, Eastman dice: “Pídale a Dios que haga que una persona específica comience a preguntarse en quien realmente puede confiar en la vida”. Sin embargo, yo pregunto entonces es: ¿Por qué es correcto que Dios haga que una persona se haga una pregunta y sin embargo es incorrecto que él le haga pensar en una respuesta? ¿Por qué es legítimo que Dios tome el control de un hombre al punto de provocar que el hombre se pregunte lo que no se hubiera preguntado si Dios no hubiera intervenido, sin embargo, no es legítimo que Dios ejerza esa misma influencia para provocar que el hombre piense es una respuesta que no se hubiera dado sin su intervención, es decir, que confíe en Jesús?
Esta sugerencia de Eastman es aún más convincente: “Ore para que Dios plante en el corazón de estas personas una inquietud interna, acompañada de un anhelo por conocer la «Verdad»”. Mi pregunta es: ¿es legítimo que Dios «plante un anhelo» en el corazón de una persona? ¿Cuán intenso puede ser el anhelo que Dios decide plantar?
Hay dos tipos de anhelos que Dios puede plantar en el corazón de un incrédulo. Uno es tan fuerte que lleva a la persona a seguir y a abrazar a Cristo. El otro no es lo suficientemente intenso como para llevar a una persona a abrazar a Cristo. ¿Por cual oraría usted? Si ora por el anhelo intenso, entonces está orando para que el Señor obre decisivamente y salve a esa persona. Si ora por el anhelo débil entonces ora por un anhelo ineficaz que lleva a la persona al pecado (pero conserva su autodeterminación).
¿Ve hacia donde nos conducen estas enseñanzas? Las personas que creen que el hombre realmente debe tener el poder supremo de la autodeterminación, no pueden orar consistentemente para que Dios convierta a los pecadores. ¿Por qué? Porque si oran por la intervención divina en la vida de un pecador, o bien orarán por una intervención poderosa (la que se apropiaría de la autodeterminación suprema del pecador), o orarán por una intervención fracasada, (la que no obra para la conversión). Entonces de cualquier manera usted o deja de orar por la conversión o admite que no existe la suprema autodeterminación humana.
La Posición de Pablo y Nuestra Oración
Pablo no deja lugar a la duda cuando se detiene en este asunto en Romanos 9:16: “Así que no depende del que quiere ni del que corre, sino de Dios que tiene misericordia” ¡De manera que él ora para que Dios convierta a Israel! ¡Ora por la salvación de Israel! No ora por una intervención ineficaz sino por una intervención poderosa, y así es como debemos orar también.
Debemos tomar las promesas del nuevo pacto de Dios e implorarle para que haga que estas promesas se cumplan en Israel y en la plenitud de los gentiles, especialmente en los individuos en nuestro propio círculo de conocidos.
- «Dios, quita de su carne el corazón de piedra y dales un corazón de carne» (Ezequiel 11:19).
- «Señor, circuncida sus corazones de tal forma que te amen» (Deuteronomio 30:6).
- «Padre, pon tu Espíritu en ellos y haz que anden en tus estatutos» (Ezequiel 36:27).
- «Señor, concédeles arrepentimiento y un conocimiento de la verdad de tal manera que puedan escapar de la trampa del diablo» (2da a Timoteo 2:25-26).
- «Padre, abre sus ojos de manera que puedan creer en el Evangelio» (Hechos 16:14).
- «Dios, crucifica la mente de aquel que está renuente a someterse a tu ley, que la mente del Espíritu gobierne su vida» (Romanos 8:7-8).
En otras palabras, debiéramos decir: «Padre, el deseo de mi corazón y mi oración a ti es que los salves».
Diez Temblores que Señale un Despertamiento Espiritual
Permítanme analizar conjuntamente todos estos aspectos y concluir retándoles con la inspiración que recibimos al saber lo que Dios está haciendo hoy en el movimiento cristiano mundial, y en Bethlehem.
Me parece que el Espíritu de Dios se está moviendo en nuestra generación de una manera fuera de lo común. David Bryant llama sismólogos espirituales a quienes estudian los despertares y avivamientos. Ellos tratan de leer las vibraciones espirituales del cristianismo para detectar si está al producirse un terremoto de avivamiento y misiones.
Y hay temblores innegables que debieran estimularnos a todos, porque Dios está en ese movimiento. Déjeme mencionar unos cuantos.
- En Urbana en 1984, el 83% de los estudiantes hizo algún tipo de promesa a las misiones. La respuesta duplicó la que hubo tres años antes ¿Por qué?
- En 1960 habían 16 000 misioneros protestantes profesionales provenientes de los Estados Unidos. Hoy (25 años después) el cálculo anda por los 30 000. Las cuatro agencias más grandes de evangelismo han crecido de 2 800 a 14 000 en el mismo período. ¿Por qué?
- Muchas de las naciones que no forman parte de la tradición occidental se han convertido en países que envían misioneros. Para el año 2000 la mitad de la fuerza misionera provendrá de estos países. ¿Por qué?
- Algunas de las agencias de misiones recién constituidas están creciendo a porcentajes fenomenales. Dos años atrás Frontiers envió sus primeras 20 personas. Hoy hay 103 de ellos en el terreno y 600 esperan en la fila para ser apuntados o aceptados. ¿Por qué?
- La matrícula a las instituciones de misiones evangélicas se ha disparado dramáticamente en los últimos 10 años. En cinco escuelas reconocidas, la matrícula se disparó de menos de 400 en 1975 a 1 200 en la actualidad ¿Por qué?
- En 1963 solo 600 personas participaron en un proyecto de misiones de corta duración. Durante los pasados 2 años el promedio ha estado cerca de los 30 000 al año en trabajos de misiones de corta duración.
- En el sur de Corea casi 1/3 de la población es evangélica. Seúl es el hogar de alrededor de 6 000 iglesias, y de las iglesias metodista, presbiteriana y pentecostal más grandes del mundo. ¿Por qué?
- Bajo la presión del comunismo, la comunidad cristiana en China creció de un millón en 1949 a 30 millones en la actualidad. ¿Por qué?
- El reconocimiento de que hay 17 000 grupos de personas que no han sido alcanzadas todavía, ha fascinado a la mayoría de las agencias misioneras en los pasados 10 años y ha despertado la imaginación de la nueva generación con el lema: “Tener una iglesia para cada persona para el año 2000” (No es el viejo lema de la Student Volunteer Movement): “La evangelización del mundo en nuestra generación” ¿Por qué?
- El movimiento ha recibido impulsos constantes por el establecimiento del U.S Center for World Mission con sus satélites y sus copias. ¿Por qué?
La lista pudiera crecer y crecer. Creo que la evidencia es suficiente para demostrar que hay temblores de algo maravilloso que está a punto de suceder. En cualquier caso, el Espíritu se está moviendo de manera excepcional a través de todo el mundo ¿Por qué?
Diez Temblores a la Iglesia Bautista Bethlehem
Antes de sugerir una respuesta prestemos atención a los pequeños temblores que han ocurrido en nuestra iglesia, Bethlehem. No hemos tenido un terremoto de avivamientos o alguna cosecha excepcional. Pero los temblores se incrementan sin parar. Solo mencionaremos unos cuantos, desde 1985:
- El ministerio de oración se ha preservado y ha crecido. Existe un equipo en progreso, un cuarto de oración, oraciones durante los servicios, oraciones todos los días a las 7 AM; y el último viernes estuvimos un 50% por encima de las reuniones de oración de los años pasados (ascendimos de 150 a 175). La oración influye en los ministerios de la iglesia. Y parece estar incrementándose sin parar de un año a otro.
- El Ministerio Internacional de Estudiantes prosperó con excelentes retiros y con el alquiler de la Casa Internacional.
- En lugar de mandar los 15 que anticipamos bajo el lema “90 para los años 90” enviamos 21.
- La revista mensual Frontier Fellowhip fue finalmente establecida todos los últimos viernes de cada mes.
- A Noël y a mí se nos dio el privilegio de dejar la iglesia durante seis semanas para ministrar en Liberia y en Camerún.
- Steve y Susan sintieron el llamado a tomar unas vacaciones sin cobrar y enseñar durante un año en Camerún, comenzando en el mes de agosto.
- Nuevamente se ofertó el curso Perspectivas los lunes en la mañana con cerca de 80 matriculados de las Twin Cities.
- Fui elegido para ser miembro del Consejo para Misiones Extranjeras de la Conferencia Bautista General [Baptist General Conference] que menciono por el impacto que tendrá en nuestra iglesia y porque es una evidencia de que nuestra iglesia es como un símbolo de esperanza en las misiones.
- La asistencia a nuestros cultos de adoración el otoño pasado estuvo un 20% por encima del otoño precedente.
- Dios puso en el corazón de nuestra iglesia cubrir el presupuesto de 1985 aunque este era un 35% mayor que el del año anterior.
Oración y Despertamiento
Y esta lista también pudiera crecer indefinidamente. Pero ¿Qué podemos aprender de todo lo que hemos visto hasta ahora? Lo que podemos aprender es que Dios se está exaltando a sí mismo al responder las oraciones de su pueblo. A.T Pierson dijo: “Nunca ha habido un avivamiento espiritual en ningún país o localidad que no haya surgido de una oración unida”. Y J.Edwin Orr dijo: “La historia está llena de excitantes resultados de cómo Dios ha obrado a través de la oración unida, planificada y sostenida”.
Podríamos demostrar que Dios se exalta a sí mismo desde la iglesia primitiva, en el Libro de los Hechos. Podríamos demostrarlo en la Reforma Protestante y en el avance de las misiones moravas, que los grandes despertares evangélicos de los siglos XVIII y XIX.
Una Exhortación Final
Así que le exhorto a que en el día de hoy sea parte de algo muy grande que Dios está haciendo producto de la oración. Ore globalmente para que Dios congregue a la plenitud de los gentiles, por la conversión de todo Israel, y la consumación de los tiempos. Sus oraciones no serán desperdiciadas, serán almacenadas en los envases del cielo y derramadas a su debido tiempo sobre la iglesia, sobre las naciones y sobre Israel.
Y oren por Bethlehem, para que, a medida que viene la cosecha, sus temblores se conviertan en un terremoto de avivamiento a escala universal con el impacto sin precedentes de Cristo sobre esta ciudad.
Y oren por la salvación de los individuos, sin cesar y sin cansarse. Hagan una lista y sean fieles por años. Concluyo con un testimonio de Geroge Müller de Bristol:
Estoy ahora, en 1864, esperando en Dios por ciertas bendiciones, por las cuales le he rogado diariamente durante 19 años y 6 meses, sin ni tan siquiera un día de receso. Todavía no ha sido dada la respuesta completa concerniente a la conversión de ciertas personas. Mientras tanto, he recibido miles de respuestas a mis oraciones. También he orado diariamente, sin recesar, por la conversión de otras personas durante 10 años, por otras 6 ó 7 años, por otras 4, 3, y 2 años, por otras alrededor de 18 meses: y todavía la respuesta, concerniente a estas personas [por las cuales he orado durante 19 años y 6 meses], no ha sido otorgada… todavía estoy en oración continua y diariamente, esperando con ansias la respuesta… Aliéntese, querido lector cristiano, con nuevos anhelos a rendirse usted mismo ante la oración, si tan solo está seguro de que pide cosas que son para la gloria de Dios”. (Autobiografía, p.296).