Vida juntos en el fin de los siglos
2da de Juan 1:1-13
El anciano a la señora escogida y a sus hijos, a quienes amo en verdad, y no sólo yo, sino también todos los que conocen la verdad, a causa de la verdad que permanece en nosotros y que estará con nosotros para siempre: Gracia, misericordia y paz serán con nosotros, de Dios Padre y de Jesucristo, Hijo del Padre, en verdad y amor. Mucho me alegré al encontrar algunos de tus hijos andando en la verdad, tal como hemos recibido mandamiento del Padre. Y ahora te ruego, señora, no como escribiéndote un nuevo mandamiento, sino el que hemos tenido desde el principio, que nos amemos unos a otros. Y este es el amor: que andemos conforme a sus mandamientos. Este es el mandamiento tal como lo habéis oído desde el principio, para que andéis en él. Pues muchos engañadores han salido al mundo que no confiesan que Jesucristo ha venido en carne. Ese es el engañador y el anticristo. Tened cuidado para que no perdáis lo que hemos logrado, sino que recibáis abundante recompensa. Todo el que se desvía y no permanece en la enseñanza de Cristo, no tiene a Dios; el que permanece en la enseñanza tiene tanto al Padre como al Hijo. Si alguno viene a vosotros y no trae esta enseñanza, no le recibáis en casa, ni le saludéis, pues el que le saluda participa en sus malas obras. Aunque tengo muchas cosas que escribiros, no quiero hacerlo con papel y tinta, sino que espero ir a vosotros y hablar cara a cara, para que vuestro gozo sea completo. Te saludan los hijos de tu hermana escogida
Como parte de la serie de mensajes que Jason Meyer está trayendo en estos días, quiero hablarles sobre "La vida juntos en el fin de los siglos". Vea como quiero enfocar el tema. Primero, declaremos la idea central del mensaje y señalaremos brevemente el lugar en 2da de Juan de dónde la obtuve. Luego trataré de explicar por qué elijo hablar sobre este tema. Después regresaré y describiré qué quiero decir con el fin de los siglos. Y a continuación volveré al texto de 2da de Juan y mostraré porque es tan importante un cierto tipo de vida juntos en el fin de los siglos.
Por tanto, primero, vea conmigo 2da de Juan versículos 5-7.
Y ahora te ruego, señora [una posible referencia a la iglesia, o a alguna noble mujer con una iglesia en su casa], no como escribiéndote un nuevo mandamiento, sino el que hemos tenido desde el principio, que nos amemos unos a otros. Y este es el amor: que andemos conforme a sus mandamientos. Este es el mandamiento tal como lo habéis oído desde el principio, para que andéis en él. Pues muchos engañadores han salido al mundo que no confiesan que Jesucristo ha venido en carne. Ese es el engañador y el anticristo.
Así que Juan está diciendo, en los versículos 5 y 6, que los cristianos deben amarse unos a otros. La última frase del versículo 5:”que nos amemos unos a otros". La última frase del versículo 6: "que andéis en él", ése es el mandamiento de amarnos unos a otros. Esto es lo que quiero decir cuando hablo de "vida juntos", una vida juntos amándanos unos a otros.
¿Por qué debiéramos amarnos unos a otros?
Entonces, el versículo 7 da una razón por la cuál debiéramos vivir juntos así en amor. "Pues [porque] muchos engañadores han salido al mundo”. Ámense unos a otros porque muchos engañadores han salido al mundo. Estoy estructurando este mensaje partiendo de la relación existente entre los versículos 6 y 7, en la palabra "pues" o "porque". Ámense unos a otros porque muchos engañadores han salido al mundo.
Así que la idea central de este mensaje hoy es: La vida juntos en amor cristiano es una gran protección contra el engaño. O, si pudiera ayudar al énfasis, usted incluso pudiera decir: Lo sentimientos cristianos mutuos, son una protección contra el engaño.
Y lo que me hace elegir el título "Vida juntos en el fin de los siglos" es que este engaño, dice Juan, es el engaño del anticristo. Versículo 7: "Pues muchos engañadores han salido al mundo que no confiesan que Jesucristo ha venido en carne”. Ese es el engañador y el anticristo”. Tan pronto como se use la palabra "anticristo", todos estamos pensando en el fin de lo siglos. Y con razón. Porque en 1ra de Juan 2:18, Juan dice: "Hijitos, es la última hora, y así como oísteis que el anticristo viene, también ahora han surgido muchos anticristos; por eso sabemos que es la última hora".
Ahora es el fin
Así que Juan tiene una perspectiva elástica de la última hora. Dice, en 1ra de Juan 2:18: "oísteis que el anticristo viene”. Hay un ser quien viene al final de los tiempos. A ustedes se les ha enseñado ("oísteis"). Él vendrá en la última hora. Pero ahora han surgido muchos anticristos. Así que ustedes saben que esta última hora se ha extendido hacia atrás, hasta ése momento, desde nuestro propio tiempo, desde el futuro hasta el primer siglo.
Él lo explica un poco más en 1ra de Juan 4:3: "todo espíritu que no confiesa a Jesús, no es de Dios; y este es el espíritu del anticristo [o, literalmente, éste es el anticristo, éste pertenece al anticristo], del cual habéis oído que viene, y que ahora ya está en el mundo". Así que viene uno, y él tiene espíritus, o falsos profetas (4:1), que "ya" están en el mundo. Y la palabra "ya", muestra que hay un anticristo que viene, y que esta experiencia actual de falsos profetas y engañadores en 2da de Juan 7, es un anticipo de él. Éste es el "ya" pero "todavía no" del anticristo.
Por tanto, ámense unos a otros. Ámense unos a otros. Ámense unos a otros.
Ésa es la idea central del mensaje, y su fundamento bíblico. Vivamos juntos en amor, porque el amor es una gran protección contra los engaños del espíritu del anticristo, que ya está en el mundo.
Un paisaje de escape
Ahora, ¿por qué he elegido hablar de esto? Porque, mientras entrego mi rol de liderazgo en Bethlehem, a Jason Meyer, el mundo al que él y ustedes se enfrentan es muy diferente al mío de hace casi 33 años atrás. Hubiera sido impensable sugerir que alguien propusiera seriamente definir el matrimonio como la relación entre dos hombres, o dos mujeres; y hubiera sido incluso más impensable que en solo treinta años, Estados Unidos perdiera tan profundamente su alma, de modo que la mayoría de los estadounidenses aprobarían esa definición de matrimonio que ninguna sociedad en el mundo ha aceptado alguna vez. Y hubiera sido impensable que en lugar de rechazar la irrealidad de los llamados matrimonios-de-un-mismo-sexo, la cultura comenzara a criminalizar la nominación de la relación sexual con personas del mismo sexo como pecado, aunque lo es.
Y junto a esta trágica pérdida de nuestra brújula moral, ha llegado la creciente pérdida de libertades y la creciente compulsión del gobierno a conformarse a perspectivas anti-bíblicas. La libertad de expresión está desapareciendo en la medida en que crece el consenso de que nuestra vergüenza es nuestra gloria (Filipenses 3:19), y de que usar el lenguaje bíblico para describir al pecado es algo repudiable y que ya se persigue como ilegal en algunos lugares. La libertad de adoración está desapareciendo mientras las comisiones metropolitanas y los concilios toman la prerrogativa de prohibir espacios y actividades de adoración.
Y junto a la pérdida de libertades para actuar en modos bíblicos, viene la compulsión gubernamental a actuar en modos antibíblicos, financiando el asesinato de los niños sin nacer, apoyando la legitimidad del comportamiento pecaminoso, y la disposición a participar en él (por ejemplo, si usted es capellán militar), y la normalización compulsiva del pecado en instituciones públicas que forzarán a la mayoría de los cristianos bíblicos a salirse de las escuelas públicas.
Ante estos desarrollos dramáticos, me pareció bien dejarles con una guía bíblica sobre cómo debe vivir la iglesia en esta nueva marginalización emergente, y en esta intimidación e incluso criminalización del lenguaje y acción bíblicos.
Así que tenemos otros dos pasos en este mensaje: ¿Qué quiero decir con "fin de los siglos" cuando digo: "Vida juntos en el fin de los siglos"? ¿Y por qué es el amor una protección tan importante contra el engaño anticristiano en estos días?
¿Qué es el "fin de los siglos"?
¿A qué nos referimos cuando hablamos del fin de los siglos? Medite en dos pasajes del libro de Hebreos. Hebreos 1:1-2: "Dios, habiendo hablado hace mucho tiempo, en muchas ocasiones y de muchas maneras a los padres por los profetas, en estos últimos días nos ha hablado por su Hijo”. Y Hebreos 9:26: Dice: "una sola vez en la consumación de los siglos, [Cristo] se ha manifestado para destruir el pecado por el sacrificio de sí mismo". Y medite en 1ra a los Corintios 10:11: "Estas cosas les sucedieron [al pueblo del Antiguo Testamento] como ejemplo, y fueron escritas como enseñanza para nosotros [en el primer siglo], para quienes ha llegado el fin de los siglos".
La comprensión del fin de los siglos en el Nuevo Testamento es que ésta época llegó con la encarnación de Jesús como Mesías. Incluso desde que Jesús vino, ya estamos en los "últimos días" (vea Hechos 2:16-17). Y si le parece extraño (dos mil años de los últimos días), no olvide cómo respondió Pedro a esa pregunta en 2da de Pedro 3. Alguien preguntó, burlándose: "¿Dónde está la promesa de su venida?". (2da de Pedro 3:4). Y Pedro respondió: "Pero, amados, no ignoréis esto: que para el Señor un día es como mil años, y mil años como un día" (2da de Pedro 3:8). Lo que significa, profundamente, que han transcurrido dos días en los últimos días, desde el ventajoso punto de vista de Dios.
El fin del fin
Así que siempre estamos viviendo en los últimos días. Siempre estamos viviendo en el final de los tiempos. Siempre estamos viviendo en el final de los siglos. Pero el final tendrá un fin. ¿Cómo terminarán estos últimos días? Vaya conmigo a 2da a los Tesalonicenses. Aquí, probablemente, Pablo da la descripción más detallada de su comprensión de cómo terminarán los últimos días. Los tesalonicenses están sufriendo aflicción y Pablo les da esta esperanza (2da a los Tesalonicenses 1:5-10):
[El sufrimiento] es una señal evidente del justo juicio de Dios, para que seáis considerados dignos del reino de Dios, por el cual en verdad estáis sufriendo. Porque después de todo, es justo delante de Dios retribuir con aflicción a los que os afligen, y daros alivio a vosotros que sois afligidos, y también a nosotros, cuando el Señor Jesús sea revelado desde el cielo con sus poderosos ángeles en llama de fuego, dando retribución a los que no conocen a Dios, y a los que no obedecen al evangelio de nuestro Señor Jesús. Estos sufrirán el castigo de eterna destrucción, excluidos de la presencia del Señor y de la gloria de su poder, cuando El venga para ser glorificado en sus santos en aquel día y para ser admirado entre todos los que han creído; porque nuestro testimonio ha sido creído por vosotros.
Así que estos últimos días terminarán con la llegada de Jesús con poderosos ángeles en fuego ardiente, para dar alivio a Su pueblo perseguido y para dar venganza a quienes no conocen a Dios u obedecen el evangelio. Y en el fin del fin, como siempre, hay un conflicto entre el pueblo de Cristo y los incrédulos y ése conflicto y persecución será finalmente resuelto con la llegada de Cristo para dar descanso a los cristianos oprimidos y para dar venganza eterna a sus opresores. Así es como termina el fin de estos siglos.
Pero entonces, en 2da a los Tesalonicenses 2, él nos da más detalles sobre el fin del fin. Comencemos leyendo el versículo 3:
Que nadie os engañe en ninguna manera [el engaño es el gran peligro de los últimos días], porque [el día de "la venida de nuestro Señor Jesucristo", versículo 1] no vendrá sin que primero venga la apostasía [o rebelión] y sea revelado el hombre de pecado, el hijo de perdición. . . . Y vosotros sabéis lo que lo detiene por ahora, para ser revelado a su debido tiempo. Porque el misterio de la iniquidad ya está en acción.
Así que, igual que en 1ra de Juan 4:3, Pablo ve a una figura maligna surgiendo al final, cuyo espíritu ya está obrando en estos días. Pablo dice que en el fin vendrá el "hombre de pecado [iniquidad]" (versículo 3), pero (versículo 7): "el misterio de la iniquidad [pecado] ya está en acción". Juan dijo, en 1ra de Juan 4:3: "este es el espíritu del anticristo, del cual habéis oído que viene, y que ahora ya está en el mundo". Así que tanto Pablo como Juan ven este final con el surgimiento de una figura poderosa, engañosa, anticristiana, y a ése espíritu obrando ya (1ra de Juan 4:3), u obrando ya el misterio (2da a los Tesalonicenses 2:7) de esa figura, hasta los últimos días.
Y el final de esa fuerza anticristiana de iniquidad, será la segunda venida de Cristo. Versículo 8: "Y entonces será revelado ese inicuo, a quien el Señor matará con el espíritu de su boca, y destruirá con el resplandor de su venida".
Evitando cuatro errores hasta entonces
No sé cuántos años transcurrirán entre hoy y esos eventos finales. Pero sé suficiente y ustedes saben suficiente para evitar cuatro errores graves.
** Error #1 *: *Los eventos finales están tan lejos en el tiempo que no necesitamos preocuparnos con las advertencias o preparativos.
No sabemos cuánto falta para que ocurran, y el misterio de la iniquidad y los muchos anticristos están diseñados para engañarnos a fin de que no los conozcamos cuando vengan, o reconozcamos a los engañadores que vienen antes de ellos.
** Error #2 *: *Los eventos están tan cercanos en el tiempo que no necesitamos preocuparnos con este mundo o con mañana.
Siempre han estado cerca desde nuestra perspectiva humana, y debieran estarlo. Y nuestro trabajo nunca cambia: Hacer discípulos en las naciones, enseñénles, obedezcan todo lo que Él mandó (Mateo 28:19-20), toda la vida cristiana.
** Error #3 **: *Habrá tanta iniquidad e incredulidad al final de los tiempos, que la oración o el trabajo para un avivamiento en las iglesias (o un gran despertar en las ciudades o naciones), será inútil. *
No lo sabemos. Nada, en la perspectiva del final en Pablo o Juan, dice que nosotros, o esta iglesia, o esta ciudad, debemos ser parte de la rebelión e iniquidad final. Según sé, Minneapolis pudiera ser unpunto rojo ardiendo con pasión por Jesucristo cuando venga. El fin será descolorido, pero nada dice que cierta familia o iglesia o ciudad serán descoloridas.
** Error #4 **: *La iniquidad e incredulidad e inmoralidad de los últimos días es una señal del fracaso de la iglesia. *
Ésa no es una declaración bíblica. No estoy diciendo que en un momento determinado la iglesia no pudiera tener más impacto en la cultura si fuera más santa o más llena del poder del Espíritu Santo. Lo que estoy diciendo es que siempre hay otros factores involucrados en la corrupción de la cultura, de modo que nunca es tan simple como decir que el fracaso de la iglesia es la razón por la cual nuestra cultura está corrupta.
Es un error decir, como dicen muchos: "La condición de la sociedad es el reporte de estado de la iglesia". Esto está especialmente errado cuando se dice al final de los tiempos. La apostasía, la rebelión, la iniquidad, la explosión del anticristo en el fin del fin es el plan misterioso de Dios, no el fracaso de la iglesia. Jesús no dirá a Su iglesia sufriente, al rescatarla de sus opresores: "Sabes, si hubieras sido una iglesia fiel, entonces no habría habido hombre de iniquidad ni una gran apostasía". De hecho, solo una iglesia fuerte y pura podría sobrevivir a estos días, no una iglesia endeble.
¿Cómo, entonces, debiéramos vivir?
Lo que nos trae de vuelta a nuestro último paso en este mensaje en 2da de Juan. ¿Cómo debiéramos responder al oscurecimiento de estos días en Norteamérica? Debiera escribirse muchos libros para dar esta respuesta. Y solo tomaré unos pocos minutos para subrayar por qué es que la respuesta de Juan es el amor unos por los otros.
Note la relación entre 2da de Juan 6 y 7. El versículo 6 termina diciendo: "para que andéis en él [en el mandamiento de amarnos unos a otros]". Y el versículo 7 da la razón: "Pues muchos engañadores han salido al mundo”. Entonces, ¿cómo debemos vivir, mientras aumentan los engañadores y abunda el espíritu del anticristo en los Estados Unidos? Debiéramos amarnos uno a otros porque la vida juntos en amor es la mejor protección contra el engaño.
¿Por qué así?
El amor cristiano no es pastoso; es un sentimiento sólido por quienes buscan y comparten la verdad de Cristo. Y por ello, como el amor entre los cristianos está basado en la verdad que comparten, ése amor se convierte entonces en una poderosa protección contra el engaño. Vea los versículos 1-2: "El anciano a la señora escogida y a sus hijos, a quienes amo en verdad, y no sólo yo, sino también todos los que conocen la verdad, a causa de la verdad que permanece en nosotros”.
Amor en la verdad de Cristo
La verdad de Cristo, la verdad del evangelio, la verdad de la Palabra de Dios es el aire en el cuál vive y florece nuestro amor ("a quienes amo en verdad", versículo 1). Es el fundamento de granito sobre el cuál descansa nuestro amor (versículo 2: a quienes amo "a causa de la verdad".
Por ejemplo, sé por las palabras, tarjetas, cartas, correos electrónicos, y parece que soy amado por cientos de ustedes a quienes apenas conozco. ¿Qué es eso? Es el tejido de almas establecido con un afecto profundo, sólido, porque cada semana y cada mes y cada año, compartimos verdades preciosas. Si usted ama a Cristo con todo su corazón y ama a Su Palabra con toda su alma, y si yo predico a Cristo y a Su Palabra con fidelidad de corazón y durante años a usted, ¿qué otra cosa podría suceder sino amor? Y así ocurrirá con los que están alrededor de usted y quienes aman la verdad. El amor cristiano no es pastoso; es un afecto sólido por quienes aman y comparten la verdad de Cristo.
Un pueblo que se ama de esta manera, no será fácilmente engañado al final de los siglos.
Una poderosa y alegre comunidad
Una última razón por la cual la vida juntos en amor protege contra el engaño. El engaño funciona porque hace que la vergüenza se vea gloriosa, y lo feo se vea lindo, y lo necio sabio, y los caminos suicidas parezcan caminos de vida, y la tristeza parezca alegría. El engaño ocurre porque pensamos que seremos más felices si nos alejamos de Cristo y aceptamos el pecado (vea 2da a los Tesalonicenses 2:12).
Pero vea el versículo 4: "Mucho me alegré al encontrar algunos de tus hijos andando en la verdad, tal como hemos recibido mandamiento del Padre". Él se regocijó por lo que experimentó en las vidas de otros cristianos. En otras palabras, vivir juntos en amor, incluso rodeados de anticristos, es una modo feliz de vida. Amar y ser amado en la verdad del evangelio es una vida profundamente satisfactoria. Una comunidad tan feliz no puede ser fácilmente engañada por los tenues placeres del pecado.
Por tanto, Bethlehem, estos son días de tinieblas para los Estados Unidos. Por tanto, no deje que el mundo, no deje que el espíritu del anticristo, o el misterio de la iniquidad, le arrebate el amor unos por los otros, o la felicidad de sus vidas juntos. Amén.