¿Cómo puede la eternidad influenciar en las tareas diarias de una madre?
El siguiente artículo es una transcripción editada de un audio.
¿Cómo puede la eternidad influenciar las tareas diarias de una madre?
Creo que ser una mamá es un llamado muy elevado. Es estar a cargo de enseñar todo lo posible a uno, dos u ocho hijos.
La mayoría de las mujeres que más prosperan y disfrutan ese llamado - y las que son mejores en él - no son aquellas cuyas vidas están limitadas por sus casas. Son mujeres que son conscientes del mundo. Son conscientes del propósito global de Dios. Son conscientes del propósito final de Dios en la historia. Son conscientes de la historia y del lejano alcance del mundo de hoy, que Dios está creando. Y estas cosas forman parte de lo que quieren edificar en estos niños. Desean criar cristianos globales, cristianos mundiales.
Una madre se deleitará más en el pequeño bebé que está frente a ella, si tiene una visión de Dios y del mundo que sea lo suficientemente grande para admitir que este pequeño niño tiene un destino por delante, y que podría llegar a ser esto o lo otro.
Si está completamente limitada por su pequeña casa - sin una visión para el mundo - creo que probablemente su escena doméstica se marchitará sobre ella, y se sentirá pequeña y limitada. Pero si lo ve en el contexto más amplio de formar parte de una empresa misionera, creo que todos los detalles de su vida pueden tener un significado global, de hecho, histórico.
Lo creo de verdad. Cuando solía sentarme para un tiempo devocional con mis cuatro hijos en casa, mi mente no pensaba simplemente, “Bien tengo un deber como padre: se supone que debo tener tiempo devocional por la noche”. Mi mente pensaba: “¿Qué llegarán a ser?”
Ralph Winter solía decir que nada tiene impacto en los niños excepto lo que hacen diariamente. Así que nosotros leímos el Global Prayer Digest (el compendio mundial de oración) a diario, y tuvimos nuestro tiempo devocional diariamente.
La meta no era sólo cumplir con las pequeñas tareas que los padres se supone deben hacer. Más bien, estás edificando hombres esperando que un día hayan asimilado tanto de Dios, y tanto de la Biblia, que eso de forma a todo su mundo. Ellos podrían terminar yendo a Paquistán a ayudar a construir refugios para víctimas de un terremoto.