Por Qué Orar

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Founder & Teacher, Desiring God

Si eres como yo, de vez en cuando tus oraciones necesitan salir de la rutina en que han caído. Usualmente usamos las mismas frases una y otra vez. Tendemos tendencia a caer en frases muy repetidas y gastadas. Caemos en un arquetipo de repetición mecánica.

El demonio odia la oración. Nuestra carne no la ama naturalmente. Por eso, no es algo que nazca completo y con pasión desde el vientre de nuestro corazón. Requiere una disciplina constantemente renovada.

Años atrás, cuando escribí Regocíjense las naciones, argumenté que la oración es un transceptor portátil en tiempos de guerra, no un intercomunicador doméstico. Dios es más como un comandante general que un mayordomo que espera para traerte otra almohada más al estudio. Por supuesto, Él es también Padre, Amante, Amigo, Doctor, Pastor, Ayudador, Rey, Salvador, Señor y Consejero. Pero en este caído “mundo lleno de demonios”, la oración funcionará mejor cuando mantengamos la frecuencia sintonizada con el Centro de mando en la lucha de fe.

Por eso cuando escribí ese libro, reuní en el mismo lugar todas las cosas por las que la iglesia primitiva oraba. Lo imprimí para mí mismo, y resultó ser una de las sacudidas que necesitaba. Pensé que las encontrarías útiles. Puede que desees imprimirlo y guardarlo por algún tiempo en tu Biblia para guiarte en tus oraciones.

Es magnífico para darte confianza en tus oraciones, y para saber que no suenas extraño en tus oraciones. Orar lo que el Nuevo Testamento ora es una manera de orar segura y poderosa.

La oración es todavía uno de los grandes y gloriosos misterios del universo – que el que lo sabe todo, el sabio, todo soberano Dios ordene que su mundo se maneje en respuesta a nuestras oraciones es asombroso. Pero ese es el testimonio uniforme de las Escrituras. Dios escucha y responde las oraciones de su pueblo. O, no descuides esta impresionante manera de influenciar naciones, movimientos, instituciones, iglesias y el corazón de las personas, especialmente el tuyo.

Si deseas orar por lo que la iglesia primitiva oraba. . .

Ora por que Dios exalte su nombre en el mundo.

Vosotros, pues, orad de esta manera: “Padre nuestro que estás en los cielos, santificado sea tu nombre.” (Mateo 6:9, LBLA)

Ora por que Dios extienda su reino en el mundo.

Venga tu reino. Hágase tu voluntad, asi en la tierra como en el cielo. (Mateo 6:10)

Ora por que el evangelio se extienda rápidamente y sea glorificado.

Finalmente, hermanos, orad por nosotros, para que la palabra del Señor se extienda rápidamente y sea glorificada, así como sucedió también con vosotros. (2 Tesalonicenses 3:1)

Ora por la plenitud del Espíritu Santo.

Pues si vosotros siendo malos, sabéis dar buenas dádivas a vuestros hijos, ¿cuánto más vuestro Padre celestial dará el Espíritu Santo a los que se lo pidan? (Lucas 11:13; cf. Efesios 3:19)

Ora por que Dios reivindique a su pueblo en sus causas.

¿Y no hará Dios justicia a sus escogidos, que claman a El día y noche? (Lucas 18:7)

Ora por que Dios salve a aquellos que son no creyentes.

Hermanos, el deseo de mi corazón y mi oración a Dios por ellos es para su salvación. (Romanos 10:1)

Ora por que Dios dirija el uso de la espada.

Tomad . . . la espada del Espíritu que es la palabra de Dios, y ora en todo momento al Espíritu, con toda perseverancia y súplica. (Efesios 6:17-18)

Ora por valor al proclamar el evangelio.

Orando en todo momento en el nombre del Espíritu. . . y orad por mí, para que me sea dada palabra al abrir mi boca, a fin de dar a conocer sin temor el misterio del evangelio (Efesios 6:18-19)

Y ahora, Señor, considera sus amenazas, y permite que tus siervos hablen tu palabra con toda confianza. (Hechos 4:29)

Ora por señales y prodigios.

Y ahora, Señor, . . . permite que tus siervos hablen tu palabra con toda confianza. . . mientras extiendes tu mano para que se hagan curaciones, señales y prodigios mediante el nombre de tu santo siervo Jesús. (Hechos 4:29-30)

Elías era un hombre de pasiones semejantes a las nuestras, y oró fervientemente para que no lloviera, y no llovió sobre la tierra por tres años y seis meses. Y otra vez oró, y el cielo dio lluvia y la tierra produjo su fruto. (Santiago 5:17-18)

Ora por la sanación de los compañeros heridos.

Que ellos oren por él, ungiéndole con aceite en el nombre del Señor. y la oración de fe restaurará al enfermo, y el Señor lo levantará. (Santiago 5:14-15)

Ora por la sanación de los incrédulos.

Y sucedió que el padre de Publio yacía en cama, enfermo con fiebre y disentería. Y Pablo entró a ver lo, y después de orar puso las manos sobre él, y lo sanó. (Hechos 28:8)

Ora por la expulsión de demonios.

Y El les dijo: Esta clase con nada puede salir, sino con oración. (Marcos 9:29)

Ora por liberaciones milagrosas.

Así pues, Pedro era custodiado en la cárcel, pero la iglesia hacía oración ferviente a Dios por él. . . Al darse cuenta de [que había sido liberado], fue a la casa de María, la madre de Juan, llamado también Marcos, donde muchos estaban reunidos y oraban. (Hechos 12:5, 12)

Como a medianoche, Pablo y Silas oraban y cantaban himnos a Dios, y los presos los escuchaban. De repente se produjo un gran terremoto. (Hechos 16:25-26)

Ora por la resurrección de los muertos.

Mas Pedro, haciendo salir a todos, se arrodilló y oró, y volviéndose al cadáver, dijo: Tabita, levántate. Y ella abrió los ojos, y al ver a Pedro, se incorporó. (Hechos 9:40)

Ora por que Dios le provea a sus tropas con lo indispensable.

Danos hoy el pan nuestro de cada día. (Mateo 6:11)

Ora por la sabiduría estratégica.

Pero si alguno de vosotros se ve falto de sabiduría, que la pida a Dios, el cual da a todos abundantemente y sin reproche, y le será dada. (Santiago 1:5)

Ora por que Dios establezca líderes en los puestos de avanzada

Después que les designaron ancianos en cada iglesia, habiendo orado con ayunos, los encomendaron al Señor en quien habían creído. (Hechos 14:23)

Ora por que Dios envíe refuerzos.

Por tanto, rogad al Señor de la mies que envíe obreros a su mies. (Mateo 9:38)

Mientras ministraban al Señor y ayunaban, el Espíritu Santo dijo: Apartadme a Bernabé y a Saulo para la obra a la que los he llamado. Entonces, después de ayunar, orar y haber impuesto las manos sobre ellos, los enviaron. (Hechos 13:2-3)

Ora por el éxito de otros misioneros.

Os ruego, hermanos, por nuestro Señor Jesucristo y por el amor del Espíritu, que os esforcéis juntamente conmigo en vuestras oraciones a Dios por mí, para que sea librado de los que son desobedientes en Judea, y que mi servicio a Jerusalén sea aceptable a los santos, (Romanos 15:30-31)

Ora por la unidad y armonía en las filas.

Mas no ruego sólo por éstos, sino también por los que han de creer en mí por la palabra de ellos, para que todos sean uno. Como tú, oh Padre, estás en mí y yo en ti, que también ellos estén en nosotros, para que el mundo crea que tú me enviaste. (Juan 17:20-21)

Ora por el fomento de la unidad.

Según oramos intensamente de noche y de día que podamos ver vuestro rostro y que completemos lo que falta a vuestra fe? (1 Tesalonicenses 3:10)

Ora por una mente de discernimiento.

Y esto pido en oración: que vuestro amor abunde aún más y más en conocimiento verdadero y en todo discernimiento, a fin de que escojáis lo mejor, para que seáis puros e irreprensibles para el día de Cristo. (Filipenses 1:9-10)

Ora por el conocimiento de su voluntad.

Por esta razón, también nosotros, desde el día que lo supimos, no hemos cesado de orar por vosotros y de rogar que seáis llenos del conocimiento de su voluntad en toda sabiduría y comprensión spiritual. (Colosenses 1:9)

Ora por conocer mejor a Dios.

[No hemos dejado de orar para que sigas] creciendo en el conocimiento de Dios. (Colosenses 1:10;) cf. Efesios 1:17)

Ora por el poder de comprender el amor de Cristo.

Doblo mis rodillas ante el Padre. . . [que] seáis capaces de comprender con todos los santos cuál es la anchura, la longitud, la altura y la profundidad, y de conocer el amor de Cristo que sobrepasa el conocimiento. (Efesios 3:14, 18-19)

Ora por un sentido de esperanza más profundo.

No ceso de dar gracias por vosotros, haciendo mención de vosotros en mis oraciones. . . para que sepáis cuál es la esperanza de su llamamiento, cuáles son las riquezas de la gloria de su herencia en los santos (Efesios 1:16, 18)

Ora por fuerza y paciencia.

[No hemos dejado de orar para que seais] fortalecidos con todo poder según la potencia de su gloria, para obtener toda perseverancia y paciencia, con gozo. (Colosenses 1:11;) cf. Efesios 3:16)

Ora por un sentido de poder dentro de ellos.

No ceso de dar gracias por vosotros, haciendo mención de vosotros en mis oraciones. . . Que podríais saber. . . y cuál es la extraordinaria grandeza de su poder para con nosotros los que creemos. (Efesios 1:16, 18-19)

Ora por que tu fe no se destruya.

Yo he rogado por ti para que tu fe no falle; y tú, una vez que hayas regresado, fortalece a tus hermanos. (Lucas 22:32)

Mas velad en todo tiempo, orando para que tengáis fuerza para escapar de todas estas cosas que están por suceder, y podáis estar en pie delante del Hijo del Hombre. (Lucas 21:36)

Ora por una fe mayor.

Al instante el padre del muchacho gritó y dijo: Creo; ayúdame en mi incredulidad. (Marcos 9:24; cf. Efesios 3:17)

Ora para que no caigas en la tentación.

Y no nos metas en tentación. (Mateo 6:13)

Mira y ora para que no caigas en la tentación. El espíritu está dispuesto, pero la carne es débil. (Mateo 26:41)

Ora por que Dios complete tus deseos de bondad.

Con este fin también nosotros oramos siempre por vosotros, para que nuestro Dios os considere dignos de vuestro llamamiento y cumpla todo deseo de bondad y la obra de fe, con poder. (2 Tesalonicenses 1:11)

Ora para que hagas buenas obras.

[No hemos dejado de orar ] para que andéis como es digno del Señor, agradándole en todo, dando fruto en toda buena obra. (Colosenses 1:10)

Ora por el perdón de tus pecados.

Y perdónanos nuestras deudas, como también nosotros hemos perdonado a nuestros deudores. (Mateo 6:12)

Ora por la protección del mal.

Líbranos del mal. (Mateo 6:13)