Una de las cosas que haces cuando estás lleno del Espíritu Santo es desbordar de gratitud hacia Dios por todo (Efesios 5:20). ¿Puedo derramar un poco de mi felicidad para compartirla con ustedes?

• Estoy agradecido por la Palabra de Dios que alimenta mi corazón día y noche. Me marchitaría y moriría sin la proteína de las promesas de gracia de Dios (como Mateo 6:33).
• Estoy agradecido por Glenn Ogren. Qué gran espíritu tiene. Tenemos grandes momentos en oración juntos (¡Espero que todos encuentren compañeros de oración!). ¡Y cómo nos regocijamos cuando llevó un hombre al Señor en el Hospital Unity la semana pasada!
• Estoy agradecido por la disponibilidad entusiasta de todos ustedes para cambiar a dos servicios de domingo por la mañana (a las 8:30 y 11:00) a partir del 22 de marzo. Va a exigir un esfuerzo extra de muchos de nosotros. Pero Dios nos ha ayudado a ver que esta es una ocasión para experimentar más de Su poder que fluye a través de nosotros para su mayor gloria. “Todo lo puedo en Cristo que me fortalece” (Filipenses 4:13). Envío un agradecimiento especial al coro, el organista, la guardería y los que trabajan con niños, los ujieres y los hombres de sonido que van a esforzarse más para hacer nuestros dos servicios igualmente gozosos.
• ¿Y qué puedo decir para expresar mi agradecimiento una vez más por la ofrenda del domingo pasado de $6.694, la más alta este año? Satanás debe estar muy disgustado con todos ustedes. ¡Excelente! Tuvimos un comienzo lento en nuestro presupuesto en enero, pero casi lo hemos alcanzado (el presupuesto hasta la fecha es de $50.000; las ofrendas hasta la fecha son de $47.740).
• Estoy agradecido de que el pasado lunes nuestra petición para la desocupación de la 13ª Avenida fue oficialmente presentada a las autoridades. Esperamos ampliarla y embellecerla como parte de un más amplio proyecto de estacionamiento. Oren para que, en los próximos tres meses, el ayuntamiento vea con favor nuestra propuesta. Gracias a Marvin Anderson y los fideicomisarios por su labor en esto.
• Y por último (aunque la lista podría seguir y seguir) estoy agradecido por cómo Dios ha prosperado nuestro ministerio laosiano/hmong, trayéndonos a la Señora Martin y a decenas de ustedes para atender las necesidades de estas personas.

Sigan soñando y orando por la manera en la que podamos multiplicar nuestra alegría en otras vías de servicio. Los días pueden ser malos, pero “confiad, Yo he vencido al mundo” (Juan 16:33). “Vuestro trabajo en el Señor no es en vano” (I Corintios 15:58).