La Oración y la Predestinación
Una Conversación entre un Devoto y un Incrédulo
Incrédulo: Entiendo que usted cree en la providencia de Dios, ¿es correcto?
Devoto: Si.
Incrédulo: ¿Eso significa que usted cree, como dice el catecismo de Heidelberg, que nada ha surgido por azar no solamente como un plan y diseño de Dios?
Devoto: Si, yo creo en lo que la Biblia enseña.
Incrédulo: ¿Entonces porque oras?
Devoto: No veo cual es el problema. ¿Porque no debería orar?
Incrédulo: Bueno, si Dios ordena y controla todo, entonces lo que él planea desde el principio se cumplirá, ¿es correcto?
Devoto: Si.
Incrédulo: Así que las cosas van a ocurrir ores tu o no, ¿correcto?
Devoto: Eso depende de si Dios ordena que esto ocurra en respuesta a la oración. Si Dios predestina que algo ocurra en respuesta a la oración, esto no ocurrirá sin la oración.
Incrédulo: Espera un momento, esto es confuso, ¿que quieres decir?, ¿que cada respuesta a la oración está predestinada o no?
Devoto: Si, así es, está predestinada en respuesta a la oración.
Incrédulo: ¿Quiere decir que si la oración no se realiza, la respuesta nunca se dará?
Devoto: Exacto.
Incrédulo: ¿Así que el asunto está supeditado al hecho de que lo pidamos en oración para que ocurra?
Devoto: Si, supongo que cuando dices 'supeditado' quieres decir que la oración sincera debe considerarse como una razón real para que las cosas ocurran, o sea que sin la oración las cosas no pasarán.
Incrédulo: Si, eso es lo que significa. Pero, ¿como puede depender de mi oración la ocurrencia de un asunto y aun así ser establecido y predestinado eternamente por Dios?
Devoto: Porque tu oracion está tan establecida como la respuesta predestinada.
Incredulo: Explicame eso.
Devoto: No es complicado. Dios ordena todas las cosas providencialmente, Dios nunca ordena un evento sin una causa, la causa también es un evento. Por lo tanto la causa también está predestinada. Así que no puedes decir que un evento ocurrirá sin la causa porque Dios lo ha ordenado de esa manera, el evento se dará si ocurre la causa.
Incrédulo: O sea que lo que quieres decir es que la respuesta a la oración siempre es preestablecida como un efecto de la oración que es una de las causas y que Dios predestina la respuesta solo como un efecto de la causa.
Devoto: Eso es correcto. Y ya que la causa y el efecto son ordenados como un todo, no puedes decir que el efecto ocurrirá incluso si no ocurre la causa porque Dios no ordena efectos sin causas.
Incredulo: ¿Podrias darme algunos ejemplos?
Devoto: Seguro. Si Dios predestina que yo muera por una herida de bala, entonces yo no moriré hasta que se dispare la bala. Si Dios predestina que yo sea sanado por una cirugía, mientras no haya cirugía, yo no seré sanado. Si Dios predestina que mi casa sea calentada mediante el fuego de un horno, mientras no haya fuego, no habrá calor. ¿Que diría usted? "Ya que Dios predestinó que el sol sea brillante, ¿Este sería brillante independientemente de si hay fuego o no?"
Incrédulo: No
Devoto: También estoy de acuerdo, ¿Por qué no?
Incrédulo: Porque el brillo del sol depende del fuego
Devoto: Correcto. De esa manera pienso yo acerca de las respuestas a la oración. Ellas son el brillo y la oración es el fuego. Dios ha establecido el universo para que, en gran medida, mueva mediante la oración, de la misma manera él ha establecido el brillo para que en gran medida este ocurra mediante el fuego. ¿No tiene sentido esto?
Incredulo: Si, creo que tiene sentido.
Devoto: Entonces dejemos de crearnos problemas y atengámonos a lo que dicen las escrituras. Pide y recibirás, no tienes porque no pides.